VERRUGA PLANTAR

Los papilomas o verrugas plantares son lesiones pequeñas, hiperqueratósicas y circunscritas (suele aparecer un anillo córneo blanquecino a su alrededor), de carácter benigno, ocasionada por el virus de papiloma humano (VPH), de la familia de los papovirus.

Se denomina papiloma porque al raspar la lesión con el bisturí, se observan unos puntos de color marrón negruzco sangrantes denominados papilas. Esto nos ayuda a diferenciarlo de las durezas o clavo plantar, que no presentan papilas. Además los papilomas no presentan dermatoglifos.


Otro dato que lo diferencia de una dureza es el dolor al pellizco, que suele ser más intenso que a la presión con el dedo. En un heloma o clavo, suele doler más a la presión perpendicular que al pellizco.

Los papilomas o verrugas plantares, pueden aparecer de forma aislada o múltiple,en forma de mosaico.

El periodo de incubación puede ir desde 2 hasta 20 meses. En el pie suelen aparecer entre los 6 y 18 meses posteriores a la infección.

¿A quién afecta el papiloma?:

El papiloma en la planta de los pies, puede afectar a cualquier edad, aunque el rango máximo de incidencia está en torno a los 12-16 años. La población con más riesgo de infección por el papiloma plantar son los adolescentes, jóvenes, e individuos con mucho estrés o con las defensas muy bajas.

¿Cómo se contagia?:

El contagio se produce por contacto directo con el virus o con el tejido descamativo del virus. También es posible el contagio directo con el material infectado por el VPH o por autoinoculación. En cualquiera de los casos siempre es necesario estar en contacto el virus, pero además, existen otros factores presentes que favorecen la infección del virus.

Factores favorecedores del papiloma:

  • Heridas: permite la entrada del virus.
  • Calor y humedad: esto puede estar provocado por un calzado poco transpirable, exceso de sudoración, calcetines de fibra sintéctica, etc.
  • Sistema inmunológico: un sistema inmunitario disminuido favorece la infección del virus.
  • Falta de higiene.
  • Piscinas públicas y duchas comunes. Para prevenir el contagio sería necesario el uso de chanclas o calcetines de agua.

Los papilomas son muy contagiosos, por lo que se aconseja limpiar la bañera después de cada uso con lejía, usar una toalla aparte para secar el pie infectado y no intercambiar calzado con otras personas.

Tratamiento del papiloma plantar:

Existen diversas alternativas que el profesional valorará en función del paciente y del tipo de lesión.

El número de sesiones también varía dependiendo del tipo de papiloma y del tratamiento utilizado. Conviene acudir al especialista lo más pronto posible, ya que, cuanto más se deje, la lesión puede aumentar y con ello el dolor y el tiempo que costará eliminarlo.

Hay varios tipos de tratamiento, el más utilizado o el que más se ve en clínica es tratamiento químico con ácidos.